Valores por México

domingo, 27 de agosto de 2017

El concierto multicolor de los informes

“De chile, de dulce y de manteca”, es una voz popular que expresan las personas cuando hay una gran variedad de algo, particularmente de comida… pues así podremos ver en los subsiguientes días y ya desde hace algunos, en el concierto de informes (por cuestión de la rendición de cuentas) y de parte de quienes tienen como pretexto rendir cuentas y lo aprovechan para su incipiente e inmediata campaña aspiracional, una avalancha con las distintas maneras de informar algo.

Ya quisieran algunos tener ese pretexto, aunque sea para informarnos a qué hora van por el PAN o para lo que gusten y manden. El caso es que en esta, acaso estridente, andanada de informes, tenemos que ponernos abusados para captar el mensaje real, quizás oculto subliminálmente entre línea y línea del espectacular o del mensaje transmitido por las redes sociales. La radio ha quedado rezagada por el momento pero seguro emergerá. El mensaje en sí del logro es secundario y en semanas, tal vez días, no nos acordaremos de ello, bueno tal vez de la Ley anti mosquito sí.

Los publicistas harán literalmente su agosto llevándose al baile, los no profesionales a sus clientes aunque algunos se esmerarán en pintarnos más bonito el acierto correspondiente del servidor público, de aquí podremos también catalogar a algunos de generosos con sus propuestas, aunque los hay tacaños, a pesar de tener una partida especial, seguramente, para rendir cuentas. Esos no aspiran a algo o son entintados con gris.

Nadie le podrá criticar a esos servidores públicos que hacen propaganda de sus informes, que no están cumpliendo con la ciudadanía, y es que en sentido estricto, aunque banálmente, están rindiendo cuentas, y qué bueno, nos enteramos de sus logros personales, a pesar de escuchar que en todos los casos han sido gracias a la ciudadanía y en especial al sector que representan, son generosos al darle crédito a los ciudadanos y si fuera el caso pues entonces “que se pongan la del Puebla”, sería lo justo.

De lo que no estoy seguro es que si estamos dispuestos los ciudadanos a que nos relaten más  “cuentos chinos” con anécdotas de logros personales. Sería injusto no reconocer el esfuerzo que algunos servidores públicos realizan y que impactan en el entorno social y político, sin embargo la transformación del país requiere más que el elogio a los logros alcanzados.

El asunto de los informes debería reglamentarse para que realmente sean actos de rendición de cuentas como lo establece la Ley y no nos hagan perder el tiempo a los ciudadanos con espectáculos “stand-uperos” ni nos contaminen con tanta estridencia visual. Ya sabemos que algunos supuran por sus espectaculares el ego, al menos, que se esperen a las campañas electorales para poner su lindo rostro, ¡ahí sí!. La campañas anticipadas disfrazadas de rendición de cuentas son gracias a que tenemos un Instituto Nacional Electoral (INE) “chafa” y a que a los Partidos Políticos así les conviene.

Lo cierto es que como ciudadanos tenemos que romper paradigmas y exigir que los informes de tales obligados sean eso, rendición de cuentas y no un pretexto aspiracional. Hoy que tendremos oportunidad de estar en comunicación con ellos y que seguramente nos pondrán su mejor cara, aprovechemos para proponérselos.

Me preguntaban si sé alguna forma en la que deban ser los informes, y la respuesta la tiene la ciudadanía, que nos pregunten cómo esperamos que rindan cuentas esos servidores públicos, escuchar a la ciudadano siempre será un acto sensato.

Remate:

Una barbaridad el dinero que asignará el INE a los partidos políticos y a los independientes en el 2018: 6.7 mil millones de pesos. Me pregunto si no será motivo de corrupción o de intentos de corrupción. Y por supuesto que estamos convirtiendo a la Democracia en un negocio, ¡Vaya, que es lamentable!

viernes, 18 de agosto de 2017

PAN y PRD de verdad: ¿en alianza para el 2018?

No dudo que el avance en la Democracia para gobernar amerite nuevas formas de convivencia, no conveniencia, que quede claro, una de ellas serán las alianzas. Desde el punto de vista político son una posibilidad para gobernar sin embargo implica una madurez que hoy día no la veo,  aunque desde el punto de vista ideológico me parece son un engendro demoníaco, no encuentro cómo poder aterrizar Principios y Valores tan distintos en el quehacer del gobierno, quizás dirán que se puede sacando lo mejor de unos y de otros, a lo que contestaré ¿y qué es lo mejor?

En México nos hemos vuelto muy pragmáticos, aunque ¡cuidado!, irse por la libre atendiendo a la mezquindad del deseo exclusivo de mayorías incluso de minorías, por ser “correctamente político”, puede implicar retrocesos en la misma esencia de nuestra identidad como nación.

Es increíble como al momento de iniciar un gobierno emanado de un partido político se puede desde el primer instante mudar de piel ideológica, incluso anteponiendo los mismos valores y principios fundamentales del partido político al cual se pertenece. Si bien se gobierna para todos de lo que se trata es que ese “ente” político  elegido gobierne con la congruencia de su ideología, de su doctrina partidista, aunque hoy día, eso ha quedado atrás. Así vemos ejemplos lamentables en todos los partidos, basta conocer los casos de corrupción que los embarra.

Y es que el gobierno de un pueblo va más allá de las cuestiones administrativas, se trata del bien común integral que no sólo satisface las condiciones materiales de los ciudadanos sino también las inmanentes, tema profundo que amerita ser tratado en el seno de los Partido Políticos  para ser entendido por éstos.

Si bien es cierto que ha sido oportuno el “éxito” de las alianzas PAN-PRD, para acceder a los gobiernos en siete entidades de nuestro país recientemente, el caso de Nayarit el más cercano,  no veo más  mérito que el haber llegado al poder. Acaso se repartieron el pastel administrativo pero más no. Así vemos los casos de Veracruz y Quintana Roo, que si bien es cierto es muy pronto para esperar un cambio, no se oyen cosas diferentes a sus antecesores, más que éxitos revanchistas.

Ya los presidentes del Partido Acción Nacional y de la Revolución Democrática: Ricardo Anaya Cortés y Alejandra Barrales Magdaleno, se aprestaron hace unos cuantos meses, en la víspera de la derrota electoral del Estado de México, con su gris candidata Josefina Vázquez Mota y su malquerido Juan Zepeda Hernández, como estrategia mediocre para intentar revertir la contundente derrota de sus partidos en esas elecciones, tratando de que panistas y perredistas voten por uno u otro candidato a última hora. Sin embargo de ahí se fue motivando una “Alianza amplia opositora”, no sé si en contra del Partido Revolucionario Institucional (PRI) o de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Aun no se ponen de acuerdo.




El más aventado en el PAN con este rollo, es el presidente de su comisión política, Rafael Moreno Valle, quien se le ve muy activo promoviéndola a pesar de no contar con el apoyo al interior de la estructura de ese partido aunque más grave aún resulta el caso del PRD en el que su presidenta, encona a esos “caballos de Troya”, así llamó algunos de sus correligionarios que intentan desestabilizar a su partido torciendo a favor de AMLO aunque ella misma no descarta una alianza con este simpático pero real y posible presidenciable, sin duda será de pronóstico reservado este asunto.

Me parece, finalmente, que hay tiempo de una estrategia de gobierno sólida por parte de algunos partidos políticos, la clave está al interior de los mismos, que sin ser ingenuos se pueda basar en la concordancia interna entre dirigentes y militantes, sustentada en la unidad de principios, de valores, de ideología, por supuesto en la generosidad, sensatez de sus dirigentes, pero lo más importante es la humildad de reconocer que no podrán solos y la mejor alianza es con los ciudadanos.

Remate:

En nuestra comunidad no sé si los candidatos y aún más los partidos están entendiendo la tendencia en la cuestión electoral, más aun hoy, con una militancia cautiva en cada uno de los partidos políticos, se hace necesario que tenga la ciudadanía un papel más importante en el juego interno de los partidos políticos, espero la tomen en cuenta.


viernes, 11 de agosto de 2017

Nunca he estado en la República Bolivariana de Venezuela pero…

Según los buscadores turísticos,  para llegar a Venezuela desde  la Blanca Mérida de Yucatán, México, tengo que abordar un vuelo para trasladarme a la ciudad de México, recorriendo 998 km; de  la ciudad de México al Aeropuerto Internacional de Tocumen sería un transbordo y recorrer 2413 km, de ahí recorrer 1370 km más por aire aterrizando en al Aeropuerto Internacional Simón Bolivar (mi tocayo) de la ciudad de Maiquetía en la periferia de su capital: Caracas, algo lejos ¿no?. Si bien nos va, serán 18 horas de viaje, tiempo suficiente para reflexionar sobre lo qué acontece en América Latina. Al tocar tierras bolivarianas venezolanas, seguramente el gobierno de Maduro me declararía persona “nongrata” por no estar de acuerdo con sus rollos de gobierno, y me deportarían “ipso facto” si es que antes no me “apañan” (en México lo tomamos como detener, privar de tu libertad). Y todo ésto pagando $27,399.00 pesos mexicanos (ida y vuelta)

Una introducción, quizás sarcástica, pero que presagia circunstancias adversas para el pueblo venezolano, y así es ¿Cuánto han sufrido en las últimas décadas, por democratizar a su País y vivir en libertad plena? Cómo podría no ser, si sus últimos gobernantes entronizados han sido caudillos que en su momento invitaban a un  fantasma, incluso dejaban una silla desocupada en el comedor por si llegaba, o bien escuchando pajaritos que le susurran al oído, manifestándoles su beneplácito. Pues si, así se las gastaba el anterior gobernante Hugo Chávez, ya fallecido, y el hoy dictador Nicolás Maduro.

Venezuela la otrora poderosa suministrante de petróleo en el mundo, motivo de la perdición de la clase política por su control, hoy es una Nación que aunque sus reservas de hidrocarburos son probadas, irónicamente existe pobreza para sus habitantes, fruto de una hegemonía gubernamental basada en el egoísmo y la ambición, aunada a una ideología impropia fruto del totalitarismo de influencia Castrista, de quienes recibieron adoctrinamiento extremo, una ideología ni siquiera social, sino fundamentada, si es posible eso, en el ego de sus gobernantes por tener de rodillas a sus compatriotas.

Hoy Venezuela no está solamente imposibilitada para suministrar de los insumos básicos y necesarios para sus habitantes sino que no puede garantizar la libertad plena a sus hijos, ¡ha sido usurpada por una dictadura!. A pesar, lamentablemente,  de los disminuidos esfuerzos internacionales por revertir la acción totalitaria del gobierno en turno, no han tenido fortuna aún los venezolanos.






Ellos tenían una forma de gobierno con su Constitución, de manera preocupante pero estable, fruto de un referendo en 1999 con Hugo Chávez, y ya se veía venir su “socialismo del siglo XXI”,  hoy día ante el avasallamiento de todas las imposiciones en el congreso y una Constitución a modo “la Asamblea Constituyente” de reciente imposición, ha venido a consolidar la hegemonía de Maduro en el poder: la dictadura de Maduro, quien apoyado por la ignorancia de un sector popular y solapado por la anuencia de su séquito formado por rabiosos antidemocráticos y fieles lamesuelas, han marcado el retroceso en los derechos políticos y humanos de los venezolanos.

Un proyecto ambicioso de Maduro por reformar la Constitución anterior sin las garantías democráticas más elementales, y esta vez no hubo ningún referendo y los mecanismos que garantizan transparencia fueron eliminadas.


¿Entonces cómo no ser solidario con ese pueblo? Acaso ¿parece descabellado? Se trata de un pueblo latinoamericano con quien nos unimos a través de una herencia histórica, que mira hacia la libertad de nuestros países, no por nada el Papa Montini, Beato Pablo VI llamó a América Latina  “El Continente de la Esperanza”, poniendo en relieve "la original vocación" de América Latina de "plasmar en una síntesis nueva y genial lo antiguo y lo moderno, lo espiritual y lo temporal, lo que otros te han dado y tú…”

Pareciera un sinsentido ocuparse de los problemas de un pueblo tan lejano pero pienso que podemos ser solidarios en la distancia y el espacio con acciones concretas desde nuestra trinchera, así que sugiero para ello: estar informados de lo que acontece política y democráticamente en América Latina, ser un promotor de la libertad, de los derechos humanos y políticos en nuestro país, no ser despreocupados de la cosa política (si se puede participar en ella, qué mejor) y desde luego el sentir genuino con quienes padecen de las injusticias políticas y sociales.

Ojalá hayan más propuestas de la sociedad, las merecemos los ciudadanos de todo el mundo, ¡las exigimos!

Remate:

En las mesas políticas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que se celebran en estos días en diferentes ciudades del país, rumbo a su Consejo Político Nacional,  resulta interesante el ejercicio que están realizando los priistas encaminados a las elecciones del 2018, parece que va enserio romper con algunas medidas antidemocráticas como la reelección de “plurinominales” a puestos similares, quien debe estar echando chispas es Beltrones, quien ha sido diputado y senador en varias ocasiones por esa vía y no dudo que lo hubiera intentado nuevamente.  La atención también se centra en las candidaturas de dos que no son militantes en el PRI: Jose Antonio Meade Kuribreña y Aurelio Nuño Mayer. ¡veremos!


Valdrá la pena que otros partidos miren lo que están haciendo en el PRI, ¡no les vayan a dar un susto! 

viernes, 4 de agosto de 2017

El rostro institucional de la corrupción: el moche

Hace algunos años, tuve el privilegio de escuchar una conferencia del maestro Miguel Angel Cornejo (qepd), se dirigía a la audiencia con una emotiva anécdota para narrar la explicación que daba a un grupo de inversionistas japoneses del fenómeno de la corrupción,  palabras más palabras menos les decía: la corrupción es el impuesto más grande que tiene que pagar la población de un país, y que puede llegar a cifras verdaderamente escandalosas, su origen es tan versátil que se encuentra con porcentajes altísimos en cualquier sector de la población y puede afectar el PIB (producto interno bruto) introduciendo mayor inflación para un país, más toda una andanada de términos de la teoría económica,  en cambio si fuera en México, en nuestro país, en América Latina, se referiría  como, tranza, cochupo, “moche” y entenderíamos perfectamente de lo que estamos hablando y cómo nos afecta. Pienso que cuando el maestro habló de este tema no quiso relacionarlo con el fenómeno de la globalización en la que México, si no exportó la maña de los moches, sí el léxico (lenguaje en el argot delincuencial)  para describirlo, siendo que actualmente ningún país se salva de tan maldita actividad.

(con los créditos al caricaturista)

Lamentablemente la corrupción es uno de los flagelos más ofensivos y que frenan el desarrollo de una nación y es tan obsceno este fenómeno que se ha creado, incluso, el día internacional contra la corrupción: el 9 de diciembre de cada año, para que no lo olvidemos.

Cifras estratosféricas que laceran la dignidad de una nación completa, nos dicen que el 10% del PIB de nuestro país, según datos de Instituto Mexicano por la Competitividad (IMCO) y que coinciden incluso con las del Banco Mundial, la Organización de los Estados Americanos (OEA), el  Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) corresponde a recursos producto de la corrupción, es decir aproximadamente -dejen saco mi calculadora científica porque en la normal no alcanzan los ceros- 2073 millones de pesos en 2016, información cotejada y confirmada por el  Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

A lo mejor podemos pensar que el 10% del PIB no es nada, pero imagínese que el tacón de su zapato tenga 10 clavitos y que el 10% de ellos sobresalga, es decir un clavito, digo… un clavito no es nada, pero con una punta filosa al interior de tu calzado, ¡un sólo clavito!, seguro no es estarías dispuesto a tolerarlo, a menos que seamos masoquistas.


De las dos preocupaciones más apremiantes para los mexicanos están: en primer lugar la corrupción seguida por la inseguridad, así que es una realidad que en nuestro país tal calamidad está lastimando la dignidad del ciudadano y la de nuestra nación. Se estima que los ciudadanos de clase media destinan el 14% de sus ingresos para actos de corrupción mientras que en la población de bajos recursos este dato llega al 33%, y no por voluntad propia sino obligados por las circunstancias, entonces preguntémonos si esto de la corrupción no es un flagelo.

Pero aterricemos el punto, parece que la tranza galopa sin freno y es que los últimos escándalos políticos de gobernadores relacionados con tal fenómeno (los Duarte, Moreira, Borge, Yarrington, Padrés etc.) y otros tantos funcionarios, actualmente servidores públicos, han contribuido para que esta quimera se convierta además en un estigma angustiante para los mexicanos. La iniciativa privada tampoco se queda atrás con feroces planteamientos que han desenmascarado corruptelas lacerantes. La Secretaría de la Función Pública hoy es un elefante blanco y aun no se designa un Fiscal Anticorrupción, porque nuestros senadores no se ponen de acuerdo, entonces, ¿de qué estamos hablando hoy día en el Estado Mexicano?

No obstante ya algunos partidos políticos han tomado cartas en el asunto, algunos de manera descarada e inoportuna como en el PRI al expulsar de sus filas a aquellos gobernantes o servidores públicos que le han hecho “pasar aceite” (aún siguen algunos y algunas por ahí placeándose muy campantes y hábilmente enquistados) y sin duda nefastos para este país, otros siguen intentando ocultar bajo la alfombra sus acontecimientos internos, como en el PRD, los menos son partidos chiquitos pero expertos de la maña y, otros aun peor y desvergonzadamente, sin empacho y con la complicidad de las autoridades siguen mancillando la inteligencia de los mexicanos, ahí está López obrador y sus leales operadores en MORENA, ese es su modus operandi…(recordemos aquellas famosas “ligas” cuando andaba en el PRD, o los sobres con dinero de sus operadores caídos en desgracia y captados in fraganti recientemente, etc.)

Y a lo mejor se preguntan dónde queda el PAN, ¡Ah si el PAN, el PAN!, sí, aquel que se erige como digno representante del humanismo y del bien ser, ese también ha sido víctima de la tranza, de los cochupos, de la corrupción de muchos de sus correligionarios y peor aún cuando tuercen los principios que defienden a cabalidad, ese instituto político no se cuece aparte. Me pregunto ¿qué se ha hecho en el PAN para combatir la corrupción?. Su Doctrina y sus valores ya probados, ahí están y por escrito, la brega de eternidad ha estado en momentos claves de la historia de este país pero de nada ha servido en esta casi heroica lucha contra la tranza pues irónicamente el factor que le impide cumplir con su fin es la presencia de corrupción al interior del  mismo partido.


Hace unos días, ante la denuncia integrada por panistas y no, formulada a las instancias correspondientes del Partido Acción Nacional, (aunque considero debieron haberla interpuesto ante la PGR, seguro les habría dado mucho gusto atender la denuncia a panistas) se ha emitido un dictamen, “pliego conclusivo” por parte de la Comisión Anticorrupción del instituto político antes mencionado, dicha Comisión integrada por Luis Felipe Bravo Mena (presidente) y los comisionados,  Silvia Garza Galván,  Fauzi Hamdan Amad, María Murguía Gutiérrez y Ernesto Ruffo Appel, finalmente exoneró a los involucrados de presuntos actos de corrupción, uno de ellos es el actual presidente del Comité Directivo estatal del PAN en Yucatán: Raúl Paz Alonzo.

No estoy en condiciones de juzgar ni de culpar a los involucrados en tales actos, no tengo elementos, y hacerlo sobre las rodillas sería un acto de corrupción de mi parte, pero decimos sabiamente que: “cuando el rio suena, agua lleva”. Sin embargo sí puedo decir después de haber leído el dictamen en cuestión, que resulta decepcionante tal resolución y no por el veredicto final sino por la tenue intención para investigar los hechos señalados, percibo en el documento en cuestión, una falta de actitud y no puedo calificar mas que de mediocre el tiempo que se dieron para investigar el caso, no se advierte una manifiesta y decidida motivación de llegar a las últimas consecuencias, cuestión que es reprobable, así sea que el resultado culmine con la exoneración de quien no tenga culpa, o de que se castigue a quien la tenga, sea quien sea, faltaba menos.

Debo elogiar la capacidad de los demandantes por tan voluminoso expediente, faltó que anexen el juego de attari, como en su momento lo hizo Jorge Carpizo Mcgregor en el “caso Posadas”. Pero también enaltezco la entereza de denunciar el cochupo, la tranza, el moche. Sin duda un encomiable esfuerzo al que deberíamos sumarnos como ciudadanos de cualquier credo político.

Han dejado pasar las autoridades en el PAN, irónicamente algunos de ellos señalados en actos indignos, la oportunidad de proponer una nueva forma de actuar ante la corrupción, se tenía confianza en la Comisión Anticorrupción hoy se desvanece ante la imposibilidad para incrementar el nivel de credibilidad, no sólo en la doctrina humanista que a la que se adhiere dicho instituto político sino también de la Política.

Estamos hartos de que sean los partidos políticos promotores de combatir la corrupción y sea ahí dónde se den los casos más escandalosos y oprobiosos. Algo estamos haciendo mal los ciudadanos.  Dejemos a un lado las lealtades insanas y seamos congruentes con nuestra conciencia y con la solidaridad que tanto ansiamos y necesitamos desde siempre.

Todo parece oscuro, sin embargo se siguen dando las oportunidades en el día a día para reivindicarnos como nación, cada quien haciendo lo que le corresponde, así que no bajemos la guardia, no dejemos de actuar en ese sentido. Ya más pronto que antes tendremos los procesos electorales democráticos internos y externos en nuestro país, no desdeñemos la ocasión para marcar el rumbo. Sino nosotros, los ciudadanos ¿quiénes?

Les recomiendo seguir y mantenerse informados con ejercicios ciudadanos como el de Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad https://contralacorrupcion.mx/ con excelentes liderazgos sociales y en nuestro medio ¡Ya Basta! https://www.facebook.com/Ya-Basta-Yucat%C3%A1n-748566171992529/

Remate:


“Cuanto más corrupto es el Estado, mas leyes tiene”- Tácito. Esperemos que nuestros legisladores se pongan las pilas y dejen de hacer leyes minúsculas, que a lo mejor lucen para ellos, pero que no impactan profundamente en la sociedad. Necesitamos un fiscal Anticorrupción ¡ya! y muchas cosas más, vayamos viendo a quienes les daremos la confianza de ser nuestros próximos legisladores, no volvamos a meter la pata, ¡empecemos por ahí!